Belicismos de precampaña

Tal vez crecida por ello, Aguirre llegó a decir que todos los españoles agradecerán "a la larga" lo que Aznar defienda respecto a Irak. Eso sí que es dar la cara por el líder. Tanto, que Aguirre tampoco dejó pasar por alto algunos de los razonamientos más escuchados en los últimos días en las filas del PP: el heroico papel de EE.UU. frente a Hitler y la pasividad demostrada por Rusia y Francia en los primeros momentos del gobierno nacional-socialista.
En el ánimo de ilustrar su alocución, habrá que recordar a la candidata a la Comunidad que fue el gobierno franquista quien coqueteó abiertamente con el dictador alemán y que el propio gobierno inglés, a través de su primer ministro Chamberlain, dio vía libre, en mayor medida que lo hizo el gobierno francés, a las primeras ansias expansionistas de la Alemania hitleriana en Checoslovaquia. Simples acotaciones para un discurso en el que la candidata llamó también a la fidelidad al partido por encima de cualquier otra cosa (en estos momentos tan necesaria antes los brotes de "insumisión" belicista que se está produciendo entre algunos cargos municipales del PP). Si tan ardorosa defensa aznariana tiene o no consecuencias para Aguirre en su gira autonómica se verá en los próximos días, aunque, sin duda, la candidata ha perdido su pátina de neutralidad.